El picher Jim Morris se volvió una leyenda del baseball en 1999, cuando a la edad de 35 años firmó con los Devil Rays de Tampa Bay.
Un profesor de ciencias de de secundaria y entrenador de los mismos, quien jugó en las ligas menores, deleitó a los Devil Rays con su talento al lanzar la bola a 98 millas por hora, a pesar de ya no ser un niño ni estar en sus mejores condiciones, pues años atrás se había lastimado el hombro, dificultándole jugar como lo hacía.
Aunque solo jugó 2 temporadas y pichó en solo 21 juegos de las ligas mayores, Morris se hizo ídolo de muchos fanáticos que lo seguirían a lo largo de su carrera, pues su historia es como la de Cenicienta.
Todo empezó al ser el entrenador de los Búhos , quienes no daban una en los partidos y no tenían siquiera un lugar decente en donde entrenar.
Jim Morris un buen día habló con ellos en los vestidores, y les preguntó cual era su sueño, que si no tenían metas en la vida.
Los jugadores le hicieron la promesa de que quedarían campeones del distrito, pero a cambio su entrenador debía intentar por última vez jugar en las grandes ligas, Jimmy aceptó.
Para sorpresa de todos, los Búhos quedaron campeones y Jim tuvo también que cumplir con su promesa, por lo cual fue a los tryouts de los Devils.
Al principio el equipo no estaba interesado en el pero después de ver que había lanzado a 98 millas por hora, 12 veces seguidas, se dieron cuenta de que vañía la pena intentarlo, así fue como lo firmaron a la edad de 35 años.
Fue una historia de película literalmente, pues Disney hizo una película sobre Jim llamada The Rookie en el 2002.
Un profesor de ciencias de de secundaria y entrenador de los mismos, quien jugó en las ligas menores, deleitó a los Devil Rays con su talento al lanzar la bola a 98 millas por hora, a pesar de ya no ser un niño ni estar en sus mejores condiciones, pues años atrás se había lastimado el hombro, dificultándole jugar como lo hacía.
Aunque solo jugó 2 temporadas y pichó en solo 21 juegos de las ligas mayores, Morris se hizo ídolo de muchos fanáticos que lo seguirían a lo largo de su carrera, pues su historia es como la de Cenicienta.
Todo empezó al ser el entrenador de los Búhos , quienes no daban una en los partidos y no tenían siquiera un lugar decente en donde entrenar.
Jim Morris un buen día habló con ellos en los vestidores, y les preguntó cual era su sueño, que si no tenían metas en la vida.
Los jugadores le hicieron la promesa de que quedarían campeones del distrito, pero a cambio su entrenador debía intentar por última vez jugar en las grandes ligas, Jimmy aceptó.
Para sorpresa de todos, los Búhos quedaron campeones y Jim tuvo también que cumplir con su promesa, por lo cual fue a los tryouts de los Devils.
Al principio el equipo no estaba interesado en el pero después de ver que había lanzado a 98 millas por hora, 12 veces seguidas, se dieron cuenta de que vañía la pena intentarlo, así fue como lo firmaron a la edad de 35 años.
Fue una historia de película literalmente, pues Disney hizo una película sobre Jim llamada The Rookie en el 2002.
4 comentarios:
Muy bien.
Calif 10.
me gusto la pelicula, y creo que investigaste datos aparte muy buenos, me gusto
Buena película
Excelente. Un gran ejemplo de vida
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